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La lactancia materna se convierte en la continuidad de esa unión mamá-bebé que comenzó a través del cordón umbilical.
La lactancia puede ser una experiencia maravillosa, un vínculo único e inolvidable y la mejor inversión en salud. Es el primer paso para que el bebé llegue a ser un niño y, posteriormente, un adulto sano.
Dar el pecho debería ser algo natural y fácil porque estamos diseñadas para amamantar, pero no siempre es así…
Vivimos en una sociedad en la que estamos muy desconectadas de nuestros cuerpos, de nuestra parte mamífera. Por otro lado, en los últimos años se ha promovido la lactancia artificial. Durante muchas generaciones las madres habían ido transmitiendo a sus hijas su experiencia sobre cómo dar el pecho hasta que esa cadena se cortó.
La mayoría de las que nos estamos convirtiendo en madres hoy día provenimos de la cultura del biberón y, por tanto, no tenemos referencias, no hemos visto a nadie dar de mamar.
Así que te quedas embarazada y te informas de todos los beneficios que tiene la lactancia materna.
Tienes claro que le vas a dar el pecho a tu bebé hasta que llega el momento de hacerlo y empiezan los problemas:
Por desgracia, son situaciones bastante comunes en el posparto. Las veo continuamente en mi día a día en consulta.
Detrás de estas dificultades suele haber problemas músculo-esqueléticos que tienen su origen casi siempre en el parto.
En la succión del bebé al pecho intervienen músculos, articulaciones y nervios. Si alguna de estas estructuras se encuentra en disfunción, muy probablemente la lactancia se verá afectada. Aparecerán problemas en la mamá, el bebé o en ambos:
A veces el problema está en un frenillo sublingual corto o simplemente en unas pautas inadecuadas, provenientes de profesionales no actualizados o de mitos sin fundamento.
Los fisioterapeutas especializados en lactancia estamos capacitados para detectar la causa de que una lactancia no esté fluyendo como debiera, bien para tratar o para derivar a otro profesional cuando sea necesario.
Desde un profundo conocimiento de cómo funciona la lactancia y el cuerpo del bebé, realizamos una valoración completa de la diada mamá-bebé.
En algunos casos, solo con mejorar la posición al pecho o con dar información sobre las necesidades básicas del bebé, será suficiente. A veces la solución pasará por una intervención si hay un frenillo sublingual corto restrictivo.
Mediante la terapia manual devolveremos la movilidad a estructuras que la han perdido. El tratamiento consiste en presiones muy sutiles sobre el cráneo, la espalda, el cuello, el abdomen o la boca del bebé.
Siempre nos adaptamos al bebé para que se encuentre cómodo y tranquilo, así que cuando nos deja, lo tratamos en camilla, pero es muy habitual que acabemos tratando en brazos de la mamá o al pecho.
Los resultados del tratamiento se suelen notar desde la primera sesión, con cambios importantes en el bebé y en el pecho de la madre.
Así que si tu bebé o tú no estáis disfrutando de ese momento mágico de dar y recibir leche materna, no esperes más y busca solución. Antes de que sea demasiado tarde y te veas obligada a abandonar una lactancia en la que habías puesto mucha ilusión y esfuerzo.
No estás sola. Aquí me tienes para acompañarte desde mi experiencia como fisioterapeuta especializada en lactancia, asesora del grupo de apoyo Regazo y madre que ha amamantado durante 10 años.
Puedes ponerte en contacto conmigo sin compromiso para que hablemos y veamos la mejor forma de ayudarte.
Puedes encontrarnos dentro del directorio de Profesionales de Fisioterapia en Lactancia.
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