Cuando me quedé embarazada de mi segundo hijo, tuve claro que quería prepararme para tener un parto diferente, tranquilo, bonito, en definitiva un buen recuerdo del nacimiento de mi bebé. A través de Elisa conocí el método NACES y tuve claro que era lo que yo estaba buscando, por ello empecé a acudir a clases, preparé mi cuerpo con los ejercicios y mi mente con las visualizaciones, así conseguí contactar con mi bebe y tener un vínculo muy especial con él. Mi proceso de parto empezó en casa, durante la noche, todo fue muy tranquilo, cuando estuve preparada fui al hospital, llegué y  expliqué  que quería tener un parto natural y dilatar utilizando la pelota de pilates y de pie, utilizando las posturas que había preparado con Elisa, apague la luz de la habitación y utilicé unas grabaciones que teníamos preparadas, una con música relajante que habíamos utilizado en las clases y una visualización que habíamos grabado,  poniendo mis dedos en la posición que habíamos preparado para conectar con nuestro bebe empecé a repetir “todo va a salir bien”, “vamos a hacerlo juntos” “ gracias a todas las personas y a todas las cosas que tengo alrededor”, así rompí aguas y culminé mi dilatación . Cuando llegó el momento del nacimiento, estábamos la matrona, mi marido y yo en la sala, fue todo muy íntimo y bonito, notaba a mi bebe trabajando al unisono conmigo, nos comunicábamos con cada contracción y con cada empujón pensaba “un poco más “ “un poco más y te tendré en mis brazos”, el momento del alumbramiento fue mágico, sentí como salía de mí , mi marido pudo cortar su cordón umbilical y sentimos esa únión, hicimos el  piel con piel y así empezamos una nueva etapa, el comienzo de una vida juntos fuera del vientre materno.