parto

Movimiento en el parto: 3 posturas para facilitar la dilatación

El movimiento es intrínseco al ser humano. Nuestro cuerpo está diseñado para moverse, está claro.

Los fisioterapeutas lo sabemos bien porque vemos en nuestro día a día todos los problemas derivados del sedentarismo.

Pero y en el parto…¿por qué moverse es tan importante? Pues por un lado, porque le estarás facilitando el camino a tu bebé.  Por otro lado, tú vas a soportar mejor las contracciones. Yo siempre les digo a las mamás que debemos plantearnos el parto como un gran trabajo en equipo.

El bebé está haciendo su parte del trabajo: tiene que atravesar la pelvis de la mamá, tiene que atravesar ese canal de parto o, como yo prefiero llamarlo, canal de la vida.

Y nosotras podemos y debemos colaborar con él en esa transición del útero hasta nuestros brazos.

La pelvis

Me parece que la pelvis posee un diseño maravilloso. Es un gran anillo óseo formado por cuatro huesos, cuatro piezas que encajan entre sí a la perfección:

  • Dos huesos ilíacos, que se articulan con los miembros inferiores por medio de los fémures
  • El sacro, que es el hueso de forma triangular que se encuentra al final de la columna vertebral
  • El coxis, que es ese hueso pequeñito que prolonga el sacro

Pelvis femenina

 

Por lo general, a lo largo de nuestra vida, estos huesos apenas tienen capacidad de moverse unos respecto a otros. Están unidos por fuertes ligamentos y músculos que le dan a la pelvis la estabilidad necesaria en esta parte de nuestro cuerpo.

Pero el día del parto todo cambia: gracias a los cambios hormonales que se dan durante el embarazo, estos ligamentos se van a hacer más elásticos que nunca, permitiendo que estos huesos tengan capacidad de moverse y, por tanto, que sea posible modificar los diámetros de la pelvis.

Cómo os ayuda el movimiento a ti y a tu bebé

Si observas la parte interna de la pelvis, puedes ver que se asemeja a un cuenco de forma irregular.

El bebé, en su descenso, lo que va a hacer es ir girando para adaptarse a la forma de la pelvis, buscando siempre la manera de ir adaptando su pequeño cuerpo al espacio del que dispone.

Y aquí viene la parte en la que tú puedes ayudar a tu bebé, pues dependiendo de la postura en la que te coloques podrás modificar ese espacio. Quizá, en un momento dado, un cambio de postura suponga que le estés proporcionando a tu bebé esos milímetros que necesita en su avance. Tal vez esos milímetros supongan la clave para que todo fluya, el parto progrese y no necesitemos intervenir desde fuera.

Si además adoptas posturas verticales también vas a estar aprovechando el efecto de la gravedad. En posiciones verticales, por otra parte, la cabeza del bebé puede presionar sobre el suelo pélvico totalmente, provocando que esta musculatura se vaya estirando poco a poco y estimulando el cuello uterino.

Eso sí, aunque el movimiento vaya a ayudar a facilitar la dilatación, habrá momentos en los que necesites parar y descansar. Puede ser un proceso de muchas horas y el agotamiento es un gran enemigo en el parto.

Para que de verdad tu bebé y tú forméis el mejor equipo, es fundamental que el día del nacimiento estés muy conectada con tu cuerpo, que estés muy hacia dentro. De esta manera, podrás evadirte de lo que sucede fuera y estar atenta a las señales de tu cuerpo.

Tu cuerpo te irá indicando cuáles son las posturas más favorables en cada fase del parto, qué necesita tu bebé en cada momento. Por supuesto, si ya has practicado estas posturas durante el embarazo, y las tienes integradas, será más fácil que te salgan de manera natural.

Además, si estás en movimiento, vas a poder llevar mejor las contracciones que si estás tumbada sin hacer nada. Piensa, por ejemplo, que cuando tienes cualquier dolor, seguramente lo sentirás con mayor intensidad por la noche en la cama cuando te encuentras sin hacer nada.

Desde el principio de los tiempos, las mujeres se han movido durante el parto. En grabados antiguos ya se observa cómo la mujer no permanecía inmóvil. Si te vas a una tribu perdida de África, las mujeres de manera instintiva se mueven, no buscan un sitio para tumbarse.

Seguramente nunca te has planteado defecar tumbada ¿verdad? Pues eso…

Fue allá por el siglo XVII cuando a un médico se le ocurrió la genial idea de tumbar a la mujer, con el único fin de facilitarle el trabajo a quien está asistiendo al parto. Por supuesto, sin tener en cuenta en ningún momento las consecuencias negativas que esta decisión pudiera tener tanto para la mamá como para el bebé.

Posturas para dilatación en el parto

No existe una postura ideal para el parto. Lo importante es que la mujer tenga capacidad de elegir la que ella necesite. Ya te he contado que tu cuerpo te va a ir indicando cómo tienes que moverte para facilitar el descenso de tu bebé a través de la pelvis, pero hay ciertas posturas que, por lo general, suelen funcionar a la mayoría de las mujeres en alguna fase del proceso. Son las posturas que suelen adoptar muchas mujeres de una manera espontánea, si se les ofrece libertad de movimientos. Estas posturas tienen en común que:

  • se juega con el efecto de la gravedad
  • la pelvis está libre
  • tienes la capacidad de ir variando la posición de las piernas y los brazos
  • la parte baja de la espalda tendrá un fácil acceso para poder aplicar masaje, presiones o calor si lo necesitas

A continuación te hablo de cuáles son estas posiciones.

Posición de pie

En esta posición puedes utilizar una pared, una mesa, la cama…para apoyar el peso de tu cuerpo. O puedes suspenderte de tu pareja, de una tela o de alguna parte del mobiliario. Puedes ir probando distintas posiciones de tus piernas y de tus brazos.

Postura dilatacion en el parto

Sentada sobre una pelota grande

La pelota te ofrece una gran variedad de movimientos y sueles tenerla a tu disposición en todos los hospitales. Lo ideal es que durante el embarazo te familiarices con ella para que el día del parto te sientas cómoda al utilizarla. Puedes ir variando también la posición de las piernas y el apoyo de la parte superior del tronco.

A cuatro patas

Puedes sostener el peso de tu cuerpo sobre tus rodillas y tus manos. También puedes incluir el uso de pelota, almohadas o la cama para sostenerte.

Posturas dilatacion en el parto

Estas 3 posturas tienen muchas variantes y te recomiendo que las practiques durante el embarazo asesorada siempre por un profesional cualificado.

 

Te animo a que durante el embarazo empieces a prepararte para ese gran maratón que supone el nacimiento.

Me encantaría poder acompañarte en este camino para que disfrutes de tu embarazo y de tu parto.

En la preparación al nacimiento en nuestro centro (tanto en la versión presencial como on line) aprenderás las posturas para la dilatación y el expulsivo más favorables junto a tu pareja. Además te proporcionaré herramientas que te ayudarán a gestionar el dolor durante las contracciones.

Trabajaremos también la parte emocional con el método NACES para que llegues al día del nacimiento tranquila y empoderada. Llegarás con la seguridad de tu bebé y tú sois los grandes protagonistas y de que tu cuerpo está perfectamente preparado para dar a luz.

El nacimiento de un hijo es un acontecimiento suficientemente importante y transformador en la vida para que le dediques un tiempo, para que TE dediques un tiempo.

Fisioterapia en preparación al parto: Cómo prepararte física y emocionalmente para el parto

 

 

Supongo que si estás leyendo esto es porque estás embarazada ¡Enhorabuena!

Te felicito, primero, por supuesto, por tener la suerte de estar creando vida, y también porque imagino que estás pensando en prepararte para tu parto.

Voy a contarte hoy, desde mi experiencia como fisioterapeuta especializada en maternidad y madre de dos hijos, las claves básicas para llegar al día del parto con una buena preparación física y emocional.

Yo entiendo el parto como un momento sagrado en la vida. Pienso que NO es un mero trámite por el que hay que pasar (a ser posible rápido y sin darme cuenta) antes de conocer a nuestro bebé. La bienvenida de una criatura a este mundo debería ser algo más…

La forma en la que se desarrolla el nacimiento dejará una huella imborrable en mamá y bebé.

Para la mujer supone el comienzo de su postparto y tendrá una influencia determinante en cómo va a vivir esta etapa a nivel físico y emocional.

Para el bebé también será una experiencia que le marcará para siempre. Los fisios vemos en nuestro día a día cómo afecta el tipo de parto a los bebés. Cuando las mamás acuden con ellos a consulta por problemas de irritabilidad, síntomas digestivos o dificultades con la lactancia, a menudo detrás de estos síntomas hay un parto complicado. Estas disfunciones, si no son tratadas en la infancia, pueden acarrear patologías incluso en la edad adulta.

Por ello, es fundamental llegar al día del parto con una buena preparación. Siempre les digo a mis pacientes que a nadie se le ocurre correr un maratón sin haber entrenado antes a conciencia. Por supuesto, es imposible predecir la evolución de un parto, pero habrá menos probabilidad de que la cosa se tuerza si hemos hecho los deberes durante el embarazo.

Preparación física para el parto

Los puntos clave que no deben faltar desde mi punto de vista en un entrenamiento durante el embarazo son:

  • Ejercicios de movilidad y de fuerza

Trabajaremos globalmente todo el cuerpo, pero nos centraremos mucho en la pelvis, el abdomen y el suelo pélvico.

Conseguirás prevenir dolencias típicas del embarazo como son las lumbalgias y ciáticas, y mejorarás tu condición física para al parto.

Por otra parte, estarás facilitando desde ya la recuperación postparto.

Ejercicios de preparación al parto

  • Reeducación postural

Es muy importante trabajar la postura, puesto que el embarazo implica una gran modificación del esquema corporal. Una de las maneras que más me gusta de trabajar a nivel postural es el método 5 p que, aunque puede practicarse en cualquier momento de nuestra vida, es muy recomendable durante el embarazo. Consiste en mantenerse en equilibrio sobre un tronco de madera en una postura determinada. El trabajo sobre una superficie inestable estimula la cadena de músculos posturales que impedirán que nos caigamos, activa y tonifica las fibras del suelo pélvico y del abdomen profundo. Además se equilibran las tensiones musculares de todo el cuerpo, principalmente del diafragma y la esfera abdómino-pélvica.

  • Práctica de posturas para favorecer la dilatación y el expulsivo

Debes plantearte el parto como un gran trabajo en equipo entre tu bebé y tú. El espacio que hay dentro de la pelvis se puede ampliar durante el parto si adoptas determinadas posiciones. Así que le estarás facilitando el camino a tu bebé. Además el moverte te permitirá llevar mejor las contracciones. Lo ideal es que ese día escuches a tu cuerpo, que te va a ir indicando qué movimientos hacer para favorecer el descenso del bebé. Si has practicado esos movimientos durante tu embarazo, será más fácil que esas posturas las tengas integradas y te salgan de manera natural.

Posturas de dilatación para el parto

Preparación emocional para el parto

Para mí sin duda la preparación física debería ir siempre de la mano de una buena preparación emocional.

De cómo te encuentres a nivel emocional dependerá en gran parte el buen desarrollo del proceso de parto. Numerosos estudios demuestran la relación existente entre los pensamientos-emociones y la respuesta que se desencadena a nivel hormonal. Por tanto, conviene que le dediques atención a cuál es tu actitud con respecto al parto desde los meses previos. Más teniendo en cuenta que la idea que nos transmite la sociedad respecto a lo que significa dar a luz en ocasiones es muy negativa. Asociamos la palabra parto a dolor, sufrimiento, peligro para mamá o bebé…y esto hace que nos enfrentemos con miedo e inseguridad a ese día, sobre todo si es un primer parto.

Parece que nadie te cuenta la parte bonita de la historia: que es un acto natural, que puede ser algo maravilloso, que tu cuerpo está perfectamente diseñado para parir,  que eres mucho más fuerte de lo que imaginas, que dolor no debe ir asociado necesariamente a sufrimiento… En fin, que si nadie te lo ha contado todavía, te lo cuento yo.

Ahí van mis consejos para una completa preparación emocional:

  • Infórmate a fondo sobre el proceso de parto

No saber a lo que te vas a enfrentar, en muchas ocasiones, hace que llegues a ese día con miedo, y esto no te va a beneficiar en nada.

Así que si no lo has hecho ya, busca a un profesional cualificado que te va a transmitir esa confianza que necesitas. Yo, en mis clases de preparación, te voy a transmitir todos mis conocimientos y mi experiencia para que te quede claro que TÚ eres la gran protagonista ese día.

Vas a comprobar que puedes poner mucho de tu parte para ayudar a tu bebé en su camino a través de ese canal maravilloso de tu pelvis. Además, como nunca se sabe realmente cómo puede acabar un parto, te hablaré de las distintas situaciones que se pueden presentar ese día y de las distintas opciones con las que cuentas para afrontar cada una de ellas.

Mujer informándose para el parto

  • Busca información sobre los posibles sitios para dar a luz

Cómo son las instalaciones, con qué personal cuentan, qué protocolos se utilizan…De esta manera podrás decidirte por el lugar que vaya más acorde con tus preferencias. Si puedes visitar el hospital antes de ese día y hablar con los profesionales, mejor. Te dará mucha más tranquilidad el día del nacimiento el acudir a un sitio conocido.

Embarazada informándose sobre el hospital donde va a dar a luz

  • Acude a sesiones de método NACES

    Consisten en visualizaciones que se realizan a lo largo del embarazo. Te van a permitir:

  • conectarte con tu bebé
  • aumentar la confianza en tu cuerpo
  • fortalecer la complicidad con tu pareja
  • facilitar la respuesta hormonal más favorable para el parto

Si te interesa profundizar sobre este método puedes leer este otro artículo.

Todo esto que te he contado hoy es lo que yo ofrezco a mis mamis en las clases de preparación al parto desde hace varios años.

Si piensas que todo esto resuena contigo y crees que puedo ayudarte, me encantará que me cuentes cómo sería tu parto ideal. Estoy convencida de que juntas buscaremos la mejor manera de que llegues a conseguirlo.

El nacimiento de un hijo es un acontecimiento suficientemente importante y transformador en la vida para que le dediques un tiempo, para que TE dediques un tiempo.

Puedes llamarme y reservar una cita presencial u online. Estaré encantada de que charlemos un rato y nos conozcamos.

Te atiendo en nuestro centro en Chipiona y en la consulta del doctor Barahona en Sanlúcar de Barrameda.

Si tienes cualquier duda, puedes dejármela en comentarios.

Hasta la próxima.

Elisa

 

 

 

Miedo al parto: cómo superarlo con la ayuda del método NACES

Es muy frecuente que las mujeres durante el embarazo expresen miedo al parto:  miedo al dolor, a no ser capaces de hacerlo, a no saber dar a luz, a que les suceda algo a ellas o al bebé…

Estos temores suelen darse sobre todo en el primer embarazo o después de experiencias traumáticas anteriores. Normalmente van en aumento a medida que avanzan los meses y se acerca la fecha probable de parto.

En la mayoría de los casos estos miedos van asociados a la idea que nos hemos formando de lo que es un parto.

Desde aquel “Parirás con dolor” a todas nos han llegado a lo largo de nuestras vidas a través de familiares y amigas relatos de partos largos, terribles, con mucho sufrimiento.

Las películas tampoco ayudan mucho… Todas esas imágenes van quedando grabadas en alguna parte de nuestra mente y nos asaltan cuando nos quedamos embarazadas.

superar el miedo al parto

 

Se ha demostrado que el hecho de que la mujer se enfrente al parto con esa sensación de miedo puede dificultar todo el proceso haciéndolo más largo y doloroso.

Cuando nuestro cuerpo  se siente amenazado secretará una serie de hormonas que pueden incluso paralizar el proceso.

No debemos olvidar que somos mamíferos. Si una gacela que está de parto en la sabana ve aparecer a un león, su cuerpo se encargará de que el parto se pare hasta que encuentre un lugar seguro para ella y su cría.

Pues eso mismo nos sucede a nosotras cuando no nos sentimos seguras. Por ello, es de vital importancia trabajar este tema durante el embarazo.

A veces nos centramos solo en preparar nuestro cuerpo para el día D, pero ir mentalmente preparada es igualmente necesario para poder disfrutar del nacimiento de nuestro bebé.

 

¿Cómo superar el miedo al parto?

Una de las principales causas del miedo es el desconocimiento, tanto de nuestro propio cuerpo como del proceso de parto en sí. Por tanto, deberías comenzar por informarte.

Conocer tu cuerpo y qué es lo que está sucediendo en cada fase del parto te dará la confianza para afrontarlo con tranquilidad.

La preparación con profesionales especializados te va a permitir tomar conciencia de que tu cuerpo está perfectamente diseñado para dar a luz y de que el parto es un proceso natural y no un acto que necesite ser medicalizado obligatoriamente.

Por otro lado, si tienes la posibilidad de buscar información sobre el sitio en el que has decidido dar a luz (instalaciones, personal, protocolos…) también te aportará tranquilidad.

superar el miedo al parto

 

¿Cómo puede ayudarte el Método NACES?

El Método NACES  fue creado por la psicóloga y sexóloga Esther Navarro  con el objetivo de que la mujer tuviera una vivencia del nacimiento humana, interior, emotiva... y, sobre todo, no vivida desde el miedo .

Surge de la fusión de conocimientos de psicología, sexología, hipnosis clásica y ericksoniana, programación neurolingüística y psiconeuroinmunología.

Consiste en una serie de visualizaciones en las que la mujer durante el embarazo se imagina viviendo el proceso de dar a luz, segura, empoderada, siendo ella misma y dejándose llevar por su cuerpo.

La madre (y el otro progenitor o acompañante, si lo hay) entra en un estado de relajación profundo aunque consciente en todo momento.

En estados de relajación profunda se inhibe la corteza cerebral y podemos acceder más fácilmente al inconsciente.

De esta manera podemos instaurar ahí en el inconsciente pensamientos, mensajes, emociones con carácter positivo, en un área donde habitualmente habitan los miedos. Dejamos así a estos temores relegados a un segundo plano.

Los pensamientos positivos van a desencadenar en tu cuerpo una respuesta favorable para el nacimiento, pues van a aumentar los niveles de oxitocina, endorfinas y serotonina. Por otro lado, vamos a mantener a raya otras hormonas como el cortisol y la adrenalina, que podrían dificultarlo.

Nos aprovechamos del hecho de que para nuestro inconsciente todo lo que vemos es real. Imagina que estás viendo una película de miedo en el sofá de tu casa. Tu parte racional sabe que lo que estás viendo en la pantalla no está sucediendo en realidad y que los personajes son actores. Pero para tu parte inconsciente todo es real, y probablemente tu cuerpo empiece a generar una respuesta igual que si lo fuera: tu corazón puede empezar a latir más deprisa, hay sudoración, te asustas…

Pues con las visualizaciones pasa igual. Te imaginas en una situación de parto en la que te sientes tranquila, segura, confiando en tu cuerpo. Para tu inconsciente en ese momento todo eso está sucediendo de verdad. Cuando llegue el día del nacimiento, para tu inconsciente no será una situación desconocida. Será como si ya hubiera estado allí antes. Tu inconsciente asociará el parto con un momento de tranquilidad y relajación como la que vivió durante las visualizaciones.

Además, las visualizaciones te permiten vivir momentos muy emotivos de conexión con tu bebé y de complicidad con tu pareja.

Objetivos del Método NACES

  • Aumentar la comunicación con el bebé
  • Que la mujer recupere la confianza en su cuerpo
  • Fortalecer la complicidad con la pareja
  • Que la mujer consiga coherencia entre sus emociones – pensamientos y la respuesta neurofisiológica más adecuada para dar a Luz

Llevo un tiempo acompañando en las sesiones de Método NACES a las mujeres y sus parejas como parte de las clases de preparación al parto. Disfruto cada sesión junto a ellos y pienso que es una herramienta fundamental en la preparación mental al parto.

Si estás embarazada, te animo a probarlo. Te aseguro que no te arrepentirás…

 

 

 

¿Cómo cambia nuestro suelo pélvico en el embarazo?

Con éste, voy a empezar una serie de artículos sobre cómo se modifica nuestro suelo pélvico durante distintas etapas de nuestra vida.

Voy a centrarme en tres etapas en las que esta musculatura suele estar más vulnerable: el embarazo, el parto y la menupausia.

Hoy empezamos con el suelo pélvico en el embarazo.

embarazo

Muchas mujeres empiezan a escuchar a hablar de suelo pélvico y a tomar conciencia de su existencia cuando están embarazadas.

Empiezan a preocuparse por esta zona y deciden empezar a ejercitarla. Lo ideal sería empezar a trabajarla antes, para llegar al embarazo con la musculatura en buenas condiciones, pero si ya estás embarazada no te preocupes, nunca es tarde para empezar…

Hay varios factores que pueden alterar el estado del suelo pélvico durante el embarazo:

Las hormonas en el embarazo

Durante el embarazo el aumento de los niveles de estrógenos y progesterona hace que todos los músculos y ligamentos de nuestro cuerpo estén mucho más laxos. De otra manera no sería posible que nuestro abdomen pudiera estirarse para albergar al bebé, ni tampoco la musculatura de la pelvis tendría la capacidad que tiene para estirarse en el parto.

 

El aumento del peso materno

Cuanto mayor sea ese aumento de peso, mayor esfuerzo tendrá que realizar nuestro suelo pélvico, pues no olvidemos que el suelo pélvico es la base de nuestro tronco.

Por tanto, es muy importante controlar ese aumento de peso y que sea lo indispensable durante para la gestación.

sobrepeso

El cambio en la postura

El aumento de curvas en la espalda provoca una modificación en la dirección de las presiones intrabdominales.

En condiciones normales las presiones se dirigen a la parte posterior del suelo pélvico.

En una mujer embarazada esos aumentos de presión incidirán más en la parte anterior. Esta zona  no está diseñada para soportar tanto peso y habrá más probabilidad de que ceda y se acabe debilitando.

Además es importante que cuides tu postura para no sobrecargar todavía más la zona.

Los hábitos de vida

El estreñimiento,  el pasar mucho tiempo de pie o cargar pesos, por ejemplo, pueden debilitar la musculatura todavía más.

estreñimiento embarazo

 

Calidad del tejido

Existe cierta predisposición genética a sufrir patologías de suelo pélvico debido a una incompetencia de los tejidos que se da en algunas familias.

Es habitual, por ejemplo, encontrarnos con mujeres que refieren que su abuela sufría de incontinencia y su madre también. Si hay antecedentes de problemas de suelo pélvico en tu familia debes estar todavía más alerta ante cualquier síntoma.

 

                                           

La hipotonía del suelo pélvico es fisiológica durante el embarazo y no se considera algo patológico a no ser que esté presente antes de quedarnos embarazadas.

El parto

Pasan 9 meses, y después del embarazo nos enfrentamos a un parto.

Esa musculatura, que ya venía debilitada del embarazo, se ve sometida ahora al empuje que ejerce el bebé durante el descenso por el canal de parto, y posteriormente a un sobrestiramiento durante la fase expulsiva.

Si a ello añadimos una maniobra de Kristeller, fórceps, ventosa, etc…ese estiramiento será todavía mayor.

¿Qué puedes hacer entonces durante el embarazo para mantener tu suelo pélvico en forma? Pues debemos centrarnos por un lado en fortalecerlo y por otro lado en mantenerlo elástico.

¿Cómo fortalecer el suelo pélvico?

Para ejercitar el suelo pélvico lo más recomendable son los ejercicios de Kegel y el método 5p.

El orgasmo supone una supercontracción perineal. Así que tanto sola como en compañía es una estupenda manera de ejercitar tu suelo pélvico.

orgasmo

Además es indispensable el trabajo de la musculatura abdominal, para que tanto las vísceras como nuestro bebé tengan una buena sujeción, y descarguemos en lo posible el suelo pélvico.

La reeducación postural también va a contribuir a que las presiones se repartan de manera adecuada dentro de la cavidad abdominal. De esta manera estarás protegiendo tu suelo pélvico de una carga excesiva.

¿Cómo elastificar el suelo pélvico?

Para elastificar la musculatura se recomienda practicar el masaje perineal en las últimas semanas de embarazo y se puede combinar con la utilización del EpiNo.

epino

Trabajando el suelo pélvico durante el embarazo estarás previniendo posibles problemas en el potparto (incontinencias, prolapsos, disfunciones sexuales)

Por otro lado, le estarás facilitando el camino a tu bebé en el parto. Recordemos que el bebé en su descenso por el canal de parto necesita un buen apoyo en esa escalera de caracol que forman nuestros músculos dentro de la pelvis.

Así que si estás embarazada, es un momento ideal para empezar a cuidar tu suelo pélvico. Hazlo por ti y piensa también que se lo estarás poniendo más fácil a tu bebé.

Y muy importante…ponte en manos de un profesional cualificado que esté especializado en el trabajo con embarazadas. Recuerda que los especialistas en el suelo pélvico somos los fisioterapeutas.

 

Reconoce posibles problemas en la lactancia

descárgate ahora tu guía gratis

Responsable: Clínica Fisan. Finalidad: envío de mis publicaciones así como correos comerciales. La Legitimación; es gracias a tu consentimiento. Destinatarios: tus datos se encuentran alojados en mis plataformas de email marketing Mailchimp suscrita al PrivacyShield. Podrás ejercer Tus Derechos de Acceso, Rectificación, Limitación o Suprimir tus datos. Encontrará más información en mi política de privacidad

Curso online

"Bienvenido bebé"

Preparación al parto en pareja desde la comodidad de tu hogar